"Tener cola de paja" es sentir culpa y manifestarla involuntariamente. Es considerarse responsable de una falta.
El dicho viene de un cuento en el que un perro había cometido cierta fechoría; alguien congregó a la jauría y les pidió a todos que saltaran por encima de una hoguera; quien fuera inocente no tenía nada que temer, no así el culpable pues su culpa le había convertido su cola en paja. El culpable se descubrió cuando se negó a saltar.
Ayer cuando se leyó la noticia de la aprehensión del alijo de cocaina en el velero andorrano "SABIR", en Colombia, no se pudo menos que jugar con el nombre para intentar localizar al propietario. -En el país del Govern del millors, es prácticamente imposible saberlo, porque ellos, y solo ellos, poseen dicha información-. Podría ser "SABIR", "RIBAS" al revés? Podría ser. (Hubo una época que se puso de moda invertir los nombres para denominar cualquier cosa; así el velero "AIFOS" es "SOFÍA" a la inversa, "ZENITRAM" es "MARTÍNEZ" y "GIOR" es "ROIG" al revés).
Si el velero se hubiera llamado "OCREIC", no me puedo ni imaginar el titular, ni el editorial, que hubiera sacado el panfleto oficial del estado. Pero no, no se llama "OCREIC" sino "SABIR", y hasta los malos vasallos saben que no se debe morder la mano que les alimenta. Da la impresión de que alguno, sin ningún disimulo, se esté poniendo la venda antes de tener la herida.
Estaremos atentos al Twitter del Bajo Cinca y si Ron Presidente Martí se pronuncia o no. Ya saben, "tener cola de paja"...
Intenten ser felices.
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