Porque si, y punto

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El tiempo siempre da y quita razones. 388 días después del INFAME 10 de marzo de 2.015, nada, de nada, de nada. No existe ninguna estructura de lavado de dinero, ni nada que se le parezca. De las cuatro administraciones implicadas en el mal llamado caso BPA, EEUU, Andorra, España y Panamá, solo una de ellas ha actuado con total corrección: la panameña. Ellos entraron en BPA Panamá e hicieron lo que se tenía que hacer: investigar e inspeccionar lo que en dicha entidad se decía que acontecía. Una vez investigada e inspeccionada y viendo que no ocurría absolutamente nada anómalo, se dirigieron a nuestras autoridades reguladoras para atender sus órdenes. Felicidades!!!!!!

El Señor Joan Pau Miquel sigue privado de libertad. A los accionistas se les sigue ninguneando, criminalizando y hasta pretenden continuar negándoles su derecho más básico: su defensa. 

Visto que todo su gozo se ha ido al pozo, ahora ya se trata de acusar a la BPA de lo que sea; que si no se ha pagado no sé qué a la CASS, que si los prejubilados, que si los accionistas, que si los altos directivos, que si los inocentísimos clientes, que si lo que sea...

Sigo insistiendo que desde el 26 de agosto de 2.014 hubo tiempo más que suficiente para negociar con los EEUU, y no se hizo. Sigo insistiendo en que hubo comunicación entre las autoridades reguladoras de EEUU y Andorra. Sigo insistiendo en que la BPA se utilizó como la cabeza de San Juan Bautista, servida en bandeja de plata, para tratar de tapar el verdadero problema y no lo van a poder conseguir.

Cuando nuestras autoridades reguladoras se siguen negando una y otra vez a "enseñar" lo que los representantes legítimos del pueblo les han reclamado una y otra vez, cuando nuestro Govern insiste una y otra vez en seguir apelando a "secretos de estado", cuando SI hemos visto que cuando SI interesa se pueden hacer "juicios sumarísimos express", pretender intentar hacernos creer que vivimos en un estado de derecho, me suena a ridiculez total. (A todo esto habría que añadir las implicaciones internacionales que ello supone en cuanto a seguridad jurídica para potenciales inversores o las calificaciones de las agencias de crédito respecto al País que pueden poner en aprietos a la banca andorrana con la consecuente disminución/encarecimiento del crédito y como eso afectará a individuos, compañías, etc...). Vivimos en un estado en el que la voluntad de cuatro memos descerebrados prevalece sobre la del resto. El PORQUE SI, Y PUNTO, es su lema y también, nuestra condena.

Intenten ser felices!!

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