O hacer el ridículo, o hacer el ridículo

En el Govern dels millors en una nueva demostración de su más absoluta y total incapacidad para gestionar nada, los nervios son cada vez más más patentes. A pocos días del juicio del mal llamado "caso BPA", y ante las denuncias de múltiples irregularidades y anomalías que los distintos abogados defensores han hecho llegar al Tribunal de Corts amenazan su inicio. Que el principal protagonista, sobre el cual gira la causa, aparezca como testigo y no como acusado, cuando en realidad si alguien cometió el delito de blanqueo fue él, no deja de ser una de las muchísimas paradojas que se dan en éste juicio que más que juicio parece que se va a convertir en un adelanto de la nueva temporada del Cirque du Soleil, pero en ésta ocasión con payasos y animales de dos patas. Desde éste blog siempre se ha mantenido desde el principio que el día que llegara el juicio, qué se iba a juzgar. 1031 días después del INFAME 10 de marzo de 2015, el tiempo nos ha ido dando la razón; La intervención de Banca Privada d'Andorra no fue sino una cortina de humo para tapar las aberraciones cometidas por el banco que se está intentando salvar a toda costa. El Govern dels millors, en aquella época en funciones, manda webs que un gobierno en funciones cometiera semejante tropelía, jamás hizo nada por defender a Banca Privada d'Andorra ante el "Notice of Findings" del FinCEN. Si hubiera habido el más mínimo interés por defender a Banca Privada d'Andorra podrían haber explicado al FinCEN que todas las operaciones descritas en su nota eran conocidas y estaban judicializadas, en diferentes fases de instrucción, a raíz de las propias investigaciones de la justicia andorrana o en el marco de la cooperación internacional, sin ninguna evidencia punitiva por parte de la entidad, empleados y accionistas. 1031 días después Gao Ping está en libertad. Petrov está en libertad. De Sinaloa nunca nadie ha sabido nada y los venezolanos andan tirándose los trastos a la cabeza intentando acusar a sus propios compañeros de haber robado más que ellos mismos. Lo dicho, nada de nada. Tampoco hay indicios de "malas praxis" por parte del equipo directivo ni nada remarcable en el "nunca visto" informe de auditoría realizado por una prestigiosa marca americana y pagado a precio de oro, desconozco si con los  lingotes del porteador ocasional de los mismos. Y llega el juicio. Y llega la hora de la verdad. Y tanto si se llega a celebrar, como si no, el ridículo va a ser espantoso. Si se celebra porque van a acabar juzgando unos cuantos inocentes WhatsApps que los "cerebrines" del Govern dels millors se han encargado en criminalizar, y si no se celebra, puede que al fin se hayan dado cuenta de que en el mal llamado "caso BPA" en realidad nunca ha habido nada, porque tendrán que empezar a preguntarse quién va a pagar "la dolorosa" de todas las atrocidades cometidas. (Y no les va a valer ir a esconderse a ninguna república caribeña). El mal se hizo, y los verdaderos responsables del mal hecho deben pagar por sus actos. A los Reyes Magos éste año no les voy a pedir que me traigan nada. Solo que se lleven a unos cuantos ineptos.       Intenten ser felices.