Cuando hay que defender hasta lo obvio, mal vamos

A cualquiera que haya estudiado en la escuela un mínimo de álgebra elemental, incluidos todos estos que se han apoderado de poder, los de la "cuchipandi", más todos los neófitos que se están intentando subir al carro de los que NO PRODUCEN NADA, intuyo que muchos de ellos aún se siguen pensando que dos y dos son veintidós, le puede entrar en la cabeza que si la temperatura pasa de 4 grados bajo cero a 4 grados sobre cero, el aumento total de la misma ha sido de 8 grados. (Para el que todavía no lo entienda, le hago un mapa: de -4º a -3º, va uno. De -3º a -2º, van dos. De -2º a -1º, van tres. De -1º a 0º, van cuatro. De 0º a 1º, van cinco. De 1º a 2º, van seis. De 2º a 3º, van siete, y de 3º a 4º, van ocho. Imagino que hasta los más torpes del lugar son capaces de entender esto). 

 

 

Pero, ¿esto siempre es así? Por descontado que NO. La especie humana, todavía me asombro al comprobar que aún no nos hayamos extinguido, somos capaces de hacer las mayores barrabasadas ilógicas que se nos presenten por delante y quedarnos tan satisfechos. Autoengañados, pero satisfechos. Y me explico: cuenta la Historia que cuando Rómulo fundó Roma, sin importar un pimiento si el tal Rómulo existió de verdad, ni mucho menos si fundó Roma, se puso en marcha un sistema de datación que básicamente consistía en el hecho imprescindible de la numeración correlativa. Ése sistema de datación, por razones obvias, fue muy pronto el más extendido por Europa. A dicho sistema se le denominó con las siglas a.u.c., que corresponderían a "ab urbe condita", que a su vez significa "desde la fundación de la ciudad". Primera patochada impuesta. 

Se dice, se murmura, se rumorea, se comenta, nadie sabe bien bien por qué, que el año 653 a.u.c., se correspondería con el año 100 a.C. ¿De dónde sale todo esto? Ni pajolera idea, como todo lo anterior y como todo lo que viene a continuación. En el año 532 d.C.Dionisio el Exiguo, un monje de origen sirio que vivía en un convento de Roma, matemático y teólogo, tras profundos estudios de la Biblia y de las fuentes históricas, llegó a la conclusión que había nacido el 25 de diciembre del año 754 a.u.c., y propuso que dicho año fuera llamado 1 a.D. (anno Domini), es decir, el año 1 del Señor. Y ahí empieza el lío que hasta el día de hoy, nadie ha querido arreglar. 

 

 

Los eruditos siguieron usando el sistema a.u.c. para numerar los años hasta el 753 a.u.c. y, a partir de aquí, consideraban que empezaba la Era Cristiana, con lo que el año siguiente pasaba a ser 1 a.D. No fue hasta el siglo XVII que los historiadores empezaron a nombrar los años anteriores al 1 a.D. contando hacia atrás. Por esas fechas, el sistema de numeración arábigo estaba plenamente difundido y los matemáticos hacía mucho tiempo que manejaban con soltura los números negativos, pero los historiadores no, lo que les llevó a cometer un crimen contra la Humanidad: impusieron la costumbre de que el año anterior al 1 a.D., esto es, el año 753 a.u.c., pasara a ser el año 1 antes de Cristo, en siglas 1 a.C., tras el cual venía el año 1 a.D o, equivalentemente, el año 1 d.C. (año 1 después de Cristo). Dicho así puede sonar razonable, pero el crimen queda patente si miramos la tabla de conversión resultante:

 

750 a.u.c - 4 a.C.

751 a.u.c - 3 a.C.

752 a.u.c - 2 a.C.

753 a.u.c - 1 a.C.

754 a.u.c - 1 d.C.

755 a.u.c - 2 d.C.

756 a.u.c - 3 d.C.

757 a.u.c - 4 d.C.

 

¡No hay cero! Este atentado contra el álgebra elemental puede inducir a mil equívocos y errores a quien no sea consciente de sus múltiples consecuencias, porque entre el año 4 a.C. y el año 4 d.C. no han transcurrido 8 años, sino sólo 7, porque falta el año 0, tal y como se ve claramente si estamos hablando de los años 750 a.u.c. al 757 a.u.c. (Les haría otro mapa, pero entiendo que hasta los más torpes del lugar pueden saber que de 750 a 757 van siete y no ocho). Pienso que tampoco es una cuestión de echarle todas las culpas al pobre Dionisio el Exiguo, ya que en su época en la numeración romana el cero no existía. Pero desde la época de éste hombre hasta ahora, ¿nadie se ha molestado en arreglar el inmenso error? ¿A quién o a quiénes no les interesa que dicho error se subsane? Ahí lo dejo.

 

 

Intentemos ir más lejos, e intentemos poner fecha al nacimiento de aquel que nos ha legado el sistema de datación que todavía hoy en día seguimos usando, porque básicamente también es errónea.

Si nos atenemos a los "Evangelios Canónicos", porque de "Evangelios" hay muchos, y entre los "Canónicos" están los "sinópticos", que son los de Lucas, Marcos y Mateo, más el de Juan, pero es que luego, aunque de estos ni les mentan, están los "apócrifos", entre ellos el Evangelio de Pedro, el Papiro de Egerton 2, los Papiros de Oxirrinco y el Evangelio de Tomás, podemos concluir que el nacimiento aconteció 7 años antes de lo que nos han contado. Y eso es muy fácil de verificar porque en el año 7 a.C., concretamente el 2 de noviembre, se produjo un acontecimiento único: bajo los planetas Júpiter y Saturno, la Luna hizo su aparición en fase creciente. Al año siguiente los mismos protagonistas cambiaron a la Luna por Marte, justo en medio de ellos. El extraño fenómeno se repitió entre el 19 y 24 de diciembre de 1603 y fue visto por el astrónomo Johannes Kepler, quien a través de cálculos matemáticos determinó que se repetía cada 805 años. Si a 1603 le restamos 1610, que es 805 multiplicado por dos, efectivamente nos da esa fecha. 

Pero eso no es todo. Siguiendo el hilo de los Evangelios el nacimiento se enmarca en el momento que el emperador César Augusto, ordena un censo de población, y eso ocurre entre los años 8 y 6 a.C. Se sabe que Herodes murió en el año 4 a.C., un día de eclipse de Luna. Ése año hubo dos eclipses parciales de Luna; el 13 de marzo y el 5 de septiembre. 

 

 

Herodes dijo a los Magos “Id allá, y averiguad con diligencia acerca del niño; y cuando le halléis, hacédmelo saber, para que yo también vaya y le adore”. (Mateo 2.8). Pero los Magos (no volvieron, a sabiendas de las intenciones de Herodes y regresaron por otro camino. “Herodes entonces, cuando se vio burlado por los Magos, se enojó mucho y mandó matar a todos los niños menores de dos años que había en Belén y en todos sus alrededores, conforme al tiempo que había inquirido de los magos”. (Mateo, 2.16). Por aquél entonces, tendría 2 años. Conociendo la fecha en que murió Herodes y en la que mandó matar poco antes de su muerte a los niños menores de 2 años, la fecha del nacimiento sería el año 7 ó 6 a.C. En 2008 un equipo de arqueólogos de la Universidad hebrea de Jerusalén, en unas excavaciones, descubrieron centenares de cadáveres de niños del siglo primero, con edades comprendidas entre los 0 y los 2 años, y que puede coincidir con la supuesta matanza de Herodes.

 

 

La primera vez que se visualiza la famosa estrella que siguieron los Magos, es en cuadro del pintor Giotto di Bondone, realizado entre 1303 y 1305, pero nada tiene que ver con la Supernova de Kepler, ya que lo que se ve en l'Adorazione dei Magi es el cometa Halley que Giotto vio en 1301, y que haciendo unos pequeños cálculos todo indica que entre los años 12 u 11 a.C. realizó su tradicional y recurrente paseo por la Tierra

Lo cierto es que vivimos autoengañados, pero satisfechos, desde hace siglos y siglos y siglos. Y seguimos celebrando lo que sea, sin llegar a preguntarnos ¿qué diantres estamos celebrando? Pero así es mucha de la gente que nos rodea. Gente que es incapaz de ver todas las penurias que están pasando los de su misma especie. Miramos pero no vemos. La clave de todo lo que está pasando no reside en todos esos que se han apoderado del poder, ni en la "cuchipandi", ni en los neófitos que se están intentando apuntar al carro de los que NO PRODUCEN NADA. La clave está en que mientras no les toque a ninguno de ellos, se quedan mirando, sin hacer nada, o incluso hasta se alegran del mal ajeno. A lo largo de mi escrito les he ido poniendo imágenes que se han visto en Navidad. ¿Navidad? Sí. La Navidad que está pasando tanta y tanta gente, y la Navidad a la que si entre todos no ponemos remedio, nos va a ir llegando uno tras otro. 

 

 

Decía Nelson Mandela que "una nación no debe juzgarse por cómo trata a sus ciudadanos con mejor posición, sino por cómo trata a los que tienen poco o nada". Y también dijo que "si no hay comida cuando se tiene hambre, si no hay medicamentos cuando se está enfermo, si hay ignorancia y no se respetan los derechos elementales de las personas, la democracia no es más que una cáscara vacía, aunque los ciudadanos voten y tengan Parlamento". Cuando hay que defender hasta lo obvio, mal vamos. 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Intenten ser felices.