Cuaderno de Bitácora (7)

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Día 7

¡¡Buenos días cuaderno!!, 

de acuerdo con la filosofía clásica, entre los actos voluntarios la decisión ocupa el lugar central: "Primum in intentione, ultimum in executione".

Las decisiones están orientadas a un punto de acción futuro, estrechamente conectadas a la virtud moral y al mundo emocional. El acto de decidir tiene relación con la teoría de los puntos de Steve Paul Jobs: “No puedes conectar los puntos mirando hacia adelante; solo puedes hacerlo mirando hacia atrás. Así que tienes que confiar en que los puntos se conectarán de alguna forma en el futuro. Tienes que confiar en algo: tu instinto, el destino, la vida, el karma, lo que sea. Porque creer que los puntos se conectarán luego en el camino te dará la confianza de seguir tu corazón, incluso cuando te conduce fuera del camino trillado, y eso hará toda la diferencia”.

 

 

"De aquellos barros, estos lodos". Produce auténtico asco tener que seguir padeciendo a todos los causantes de la que se nos ha venido encima, dando lecciones de lo bien que lo hicieron durante sus nefastos mandatos. ¡¡Asco!! (Podrían tener la decencia de estarse calladitos). El presente solo es entendible si conocemos en profundidad el pasado. Y el pasado es muy fácil de conocer; tan solo hace falta que nos demos unas vueltas por las hemerotecas. Pero tal y como afirmaba el bueno de Albert...

 

 

El "yoismo" instaurado por toda ésta panda que se ha apoderado del poder, más todos los neófitos que se están intentando subir al carro de los que NO PRODUCEN NADA, es lo que nos ha abocado a nuestra situación actual; ése despilfarro continuado en auténticas bobadas supinas y esos grandes recortes en lo verdaderamente importante, léase educación y sanidad, aflora ahora. Ahora todos o casi todos los gobernantes están hablando de "economía de guerra". (Muchos de ellos son los mismos que hasta no hace tanto proclamaban que esto del Coronavirus no era nada de nada). Son tan necios que ni siquiera han caído que a la crisis sanitaria le va a seguir, irremediablemente, otra crisis político-social-económica. ¿Y dónde están nuestros los responsables de lo social y de lo económico? ¿Acaso siguen con los selfies del palito? En fin...

 

 

Es por ello que he apelado, apelo y apelaré, y lo seguiré haciendo todas las veces que hagan falta, a la madurez, a la responsabilidad y a la solidaridad del pueblo soberano. Solo así nos podremos salir de ésta. Cuando lees cosas como ésta, "Un epidemiólogo español de Harvard saca los colores a España: "Se ha desperdiciado 1 mes"", vean link aquí, o ésta otra, "Médicos españoles en Milán concluyen que "España ha perdido el tiempo"", vean link aquí, a uno no le queda otra que echarse las manos a la cabeza al verificar una vez más, otra más, en manos de quiénes estamos, y que lo único que cabe esperar es que cuando todo esto acabe, que acabará, es que se les pida a toda ésta panda que se ha apoderado del poder, más todos los neófitos que se están intentando subir al carro de los que NO PRODUCEN NADA, todas las responsabilidades habidas o por haber; por lo civil y por lo militar.

 

 

En un artículo que escribí desde ésta misma tribuna, titulado "Causa - efecto", vean link aquí, escribía, y cito textualmente: "La vida ya es de por si demasiado complicada para que alguno, o algunos, quieran complicarla todavía más. Y como en cualquier proceso de aceptación de una enfermedad crónica, negación, ira o enfado, negociación, depresión y finalmente aceptación, la actitud es, por encima de todo, lo que más cuenta. Saber detectar y saber enfrentarse a los problemas es la mejor manera de acabar con ellos. Cuando la palabra cáncer apareció en mi vida, todo se me vino abajo por una temporada. Tenía que resolver demasiadas cosas a la vez para poderme ir más o menos tranquilo. Incluso llegué tarde a mi ingreso porque antes quise ir a la Notaria. Pero una vez puestos al cabo de la enfermedad, mi actitud fue a mejor cada día que pasaba. Y me vine arriba. Y hasta supe controlar el dolor que he llegado a pasar durante toda mi convalecencia". Si me aceptan un consejo, ahórrense la negación, la ira o enfado, la negociación y la depresión, y pasen directamente a la aceptación. Esto ya lo tenemos aquí, y solo cabe aceptarlo y ponerle remedio. No queda otra. 

 

 

En "tiempos de guerra", ya que todos hablan de "economía de guerra", se cambian hasta las palabras; y lo que en época de paz se llama "contrabando", en época de guerra se denomina "estraperlo". Y de eso se debería saber bastante en ésta zona. Los canales están montados, tan solo hace falta la suficiente imaginación para reutilizarlos. 

 

 

Puede que hasta esto, entre otras muchas cosas, también sirva para dar un poco de descanso a nuestra maltratada Tierra.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Intenten ser felices.

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